Recordando a Antonio en "Lo Juro por Dios"

ANTONIO ("Lo juro por Dios")

ESCRITO POR: ROJOAZUL

Antonio Vega es un personaje lleno de matices. Hasta ahora, junto a Santiago Altamirano de LAS HORAS, ha sido el galán más popular que he escrito en mis historias.

Pero que hace de Antonio un gran galán? Es un hombre que a pesar de haber perdido a su primer amor todavía cree en el verdadero amor. El es sueño de todas las mujeres, un hombre sensible, romántico, y que ama con intensidad. Santiago era apasionado, pero Antonio es más como el clásico galán. Es sincero y lucha por lo que quiere. En pocas palabras, es el príncipe azul moderno.

En los primeros capítulos de la historia, Antonio Vega inspira mucha ternura y lástima porque vive todavía bajo el fantasma de su primer esposa, Estela. Todos los días contempla su retrato en la pared, y llora porque no la tiene a su lado. Antonio es un hombre que necesita amar, amar como solamente él sabe hacerlo, con toda el alma, y es esa misma necesidad lo llevará a cometer el peor error de su vida.

Aunque tiene muchas cualidades, Antonio es un ser humano que comete errores. No es un galán perfecto, y eso es lo que lo hace más realista. El esta apunto de casarse con Renata pensando que con ella sería feliz. Lo que él no sabe es que Renata es una trepadora y que solamente lo quiere por su dinero y por puro capricho.

Sin embargo, Antonio vuelve a amar cuando conoce a Regina, su secretaria. Este será un amor verdadero, más fuerte que cualquier otro sentimiento que haya sentido. El recuerdo de Estela finalmente lo deja vivir tranquilo, y él se dedica a amar a Regina. Regina llega a su vida para hacerlo sentir lo que es el amor, y salvarlo del abismo en que vivía.

Aunque él estará dispuesto a luchar por su felicidad, muchas cosas se interpondrán entre ellos: las diferentes clases sociales que pertenecen, el odio, la envidia, y la ambición de los demás.

Desde que empecé a escribir este personaje siempre tenía a Guy Ecker en mente. Es el actor perfecto que necesitaba para que demostrará sensibilidad, romanticismo, y también fuerza. Y creo que no me equivoqué, porque cada vez que leo a Antonio, lo puede ver a él diciendo cada palabra en el dialogo.